Con mucha alegría hemos recibido la noticia del nombramiento como patrimonio, el pasado 2 de agosto de 2012, mediante Decreto No. 3, de la Alcaldía Municipal, la ruta colonial conocida como Camino Real.
La ruta fue utilizada por los españoles para el transporte de metales hacia Portobelo, puerto donde zarpaban los barcos con la valiosa carga hacia España.
La ruta fue la primera que existió entre los océanos Atlántico y Pacífico casi 400 años antes del Canal de Panamá.
Antecedentes
Juan López de Velasco escribió en 1574 una descripción del camino, escrito que reproducimos a continuación:
El camino de Panamá a Nombre de Dios por tierra es malísimo, de montañas, de arboledas altísimas, y ciénegas y derribaderos, que con la mucha agua que llueve se desbarata luego, y además de todos los negros cimarrones que andan en esta provincia, que el año de 74 dicen que son de tres mil arriba, andan en aquella parte y andan seguros, que no hay orden de poderlos debelar con la fragosidad y aspereza de la tierra que es increíble, y es muy cerrada de maleza y espinos, por donde los negros se meten, porque andan untados con un betún que los defiende de las espinas.
Actualmente puedes observar parte del camino en el Parque Nacional Chagres. Un conjunto de piedras se mantienen en su lugar en distintos sectores a pesar de los años.
Se niegan a que olvidemos la ruta, quizás por ese camino transitó algunos de nuestros antepasados.
En entrevista a La Estrella el investigador Christian Strassnig comentó: Esta declaratoria es también un homenaje a estas personas y su rol en la historia de este lugar y de las Américas.
A Cristian tuvo el placer de conocerlo en las giras que organiza al Camino Real. Casado con una panameña y de origen austriaco se ha dedicado en los últimos años a recuperar la historia del camino, y a crear conciencia en la comunidad sobre el valor histórico de la ruta.
Gracias a nuestra amiga Yady por el aviso sobre el importante reconocimiento a la ruta.
Fuentes:
Estrella de Panama – 16 de agosto de 2012
Panamá Colonial: Historia e Imagen – Pedro Martínez Cutillas