El enjaretar no es más que pasar lanas o cintas por un dobladillo que se hace con este fin en el boca (cuello) de la camisa de la pollera. A esta especie de ojales por donde pasan las cuerdas de lana o la cinta se le conoce como jareta.
Un ejemplo actual, que en este caso no es decorativo sino funcional, serían los pantalones cortos deportivos que suelen tener un cordón en la cintura para ajustarlo y evitar que se caigan.
Enjaretado de la pollera
El enjaretado se realiza alrededor de los bordes de un tejido ancho que forma parte de la boca de la camisa de la pollera panameña. Los tejidos o trencillas que se usan para enjaretar pueden ser de escalerita, endiablá, ojito de encaje, entre otros.
Yo escuchaba a mi mamá abuela hablar en esos términos, pero en esa época no era tema de conversación entre nosotros, tampoco pasaba por mi cabeza que una de mis pasiones sería la fotografía.
En la unión del enjaretado, en la pollera de gala, se colocan al frente y en la espalda una bellota o mota que son del mismo color de los zapatos y el gallardete de cinta – típico de la pollera santeña y de la capital.
Aunque relacionamos la pollera con una tradición del interior de la república, la capital también tiene su propio estilo de pollera.
Para el remate de los enjaretados en cinta se realizan lazos también colocados al frente y atrás. En el caso de la pollera de zaraza la unión del enjaretado de lana suele terminar en un lazo.
Cuando se utiliza lana se suele confeccionar una cuerda que puede estar compuesta por tres a cinco hebras de lana.
Provincias como Veraguas y Ocú suelen enjaretar entre las dos secciones de jaretas pasando sobre el tejido que las separa. Acostumbran combinarlas con lanas de dos a tres colores.
Las diferencias
Los diferentes materiales utilizados para el enjaretado y si usan bellotas o lazos va a depender del tipo de pollera y de la región que representa. Si fuera una moda actual lo más probable es que no habría confusiones, pero como es un vestido tradicional, hay que recurrir a los folcloristas y artesanos que son los que han investigado sobre el tema y su evolución en el tiempo.
Mayor difusión ha tenido la pollera santeña. Artesanos y folcloristas de la provincia de Los Santos se han preocupado por cuidar celosamente lo tradicional del vestido de esa región, pero las mujeres de todo el país usaban polleras en sus quehaceres diarios y en fiestas. Por lo que la moda regional de la época marca las diferencias.
Como puedes apreciar en las fotos los estilos varían, esa variedad enriquece nuestras tradiciones, pero cada región enfrenta el reto de preservar el estilo de su vestido tradicional.
Si quieres profundizar en este y otros detalles de la pollera panameña te recomiendo el libro Instructivo sobre uso y confección del vestido típico panameño y sus complementos de la profesora y folclorista Norma Hegenbarth López de Testa – en este salto encontrarás una entrevista a la profesora Norma realizado por la Revista Ellas de La Prensa.
*Foto de portada del Desfile de las Mil Polleras del año 2010